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Nombre vulgar<\/strong>: olmo, olma, olmo com\u00fan, negrillo, \u00e1lamo negro, llameda, om (catal\u00e1n), lamaguiro, ulmeiro (gallego), zumarr (vasco).<\/p>\n [\/vc_column_text][vc_column_text]<\/p>\n De los tres es el que suele alcanzar mayor altura, como los 25 m que tuvo uno de los olmos de Somontes en el Pardo (Madrid) o los 33 m del olmo del Camino de la Estaci\u00f3n de Aranjuez (Madrid). Tambi\u00e9n es el que alcanza fustes m\u00e1s gruesos.<\/p>\n Es caracter\u00edstico de esta especie que en sus ramas<\/strong> de varios a\u00f1os se encuentren en ocasiones costillas corchosas, especialmente en ejemplares que mal viven<\/p>\n Sus hojas<\/strong> tienen el peciolo corto (5-12 mm), m\u00e1s o menos pubescente; y un limbo con 11 a 14 pares de nervios secundarios. La asimetr\u00eda de la base tiene un desfase entre ambos lados < 7 mm. La superficie del haz es en unas progenies \u00e1spera y en otras suave. En el env\u00e9s se presenta pelos en las axilas de los nervios principales y sobre los nervios principales.<\/p>\n Los fasc\u00edculos florales <\/strong>se encuentran pegados a las ramillas. Las flores est\u00e1n constituidas por un pieza externa membran\u00e1cea, c\u00f3nica, corta, terminada en 4 a 8 l\u00f3bulos peque\u00f1os, poco profundos y ciliados; con una parte masculina formada por 3 a 5 estambres con las anteras exertas y prominentes y una parte femenina formada por un pistilo con un ovario obovado, algo tomentoso y muy comprimido que presenta en el extremo superior dos estigmas divergentes, blanquecinos y muy papiloso. La maduraci\u00f3n de las partes masculina y femenina se realiza de forma desfasada.<\/p>\n Los frutos<\/strong> tienen primero color verde y luego, en la madurez plena pardo-amarillo. La s\u00e1mara llega hasta los 2 cm de longitud, con el borde glabro y con la semilla desplazada hacia la mitad superior.<\/p>\n [\/vc_column_text][vc_column_text]<\/p>\n La madurez sexual se alcanza tempranamente, en general a partir de los siete a\u00f1os. Su floraci\u00f3n se produce con profusi\u00f3n. Ocurre a finales del invierno, varias semanas antes de la brotaci\u00f3n de las hojas, resultando muy resistes a las heladas.<\/p>\n La polinizaci\u00f3n se produce por el viento (anem\u00f3gama), lo que la hace sensible a las precipitaciones, y es cruzada entre distintos pies. El tiempo que transcurre hasta la fecundaci\u00f3n es breve, comenzando a formarse los frutos con prontitud.<\/p>\n Los frutos maduran al comienzo de la primavera, poco despu\u00e9s del desarrollo de las hojas, experimentando una r\u00e1pida diseminaci\u00f3n, especialmente en cuanto aparecen d\u00edas ventosos (anem\u00f3cora). Su producci\u00f3n anual es regular (cada\u00f1ega), pero con frecuencia una proporci\u00f3n significativa, incluso a veces la totalidad es vana ya que sus semilla carecen de embri\u00f3n. En condiciones naturales la semilla tiene una longevidad muy corta.<\/p>\n [\/vc_column_text][vc_column_text]<\/p>\n Es una especie colonizadora. Su estrategia de dispersi\u00f3n est\u00e1 relacionada con el final del invierno, aprovechando la oportunidad de ocupar la tierra cuando el tapiz herb\u00e1ceo todav\u00eda no ha brotado con fuerza o de los terrenos desnudos de los nuevos sedimentos o erosiones producidas durante el oto\u00f1o-invierno.<\/p>\n En la Pen\u00ednsula Ib\u00e9rica habita desde el nivel del mar hasta los 1500 m en Sierra Nevada. Es una especie hidr\u00f3fila, m\u00e1s propia de la llanura de inundaci\u00f3n (vegas) y m\u00e1rgenes de cauces que de las navas, aunque puede habitar en diferentes localizaciones siempre que su suelo mantenga la necesaria humedad durante el periodo estival. Se desarrolla en suelos tanto calc\u00e1reos como sil\u00edceos. Presenta una relativa tolerancia a los fr\u00edos invernales y a las altas temperaturas estivales, en un orden semejante a las que soporta la encina.<\/p>\n [\/vc_column_text][vc_column_text]<\/p>\n Sus terrenos naturales, especialmente las vegas, fueron progresivamente transformados para el cultivo agr\u00edcola desde el comienzo del Neol\u00edtico, aunque por otro lado la especie fue propagada por el inter\u00e9s de su madera y de otras aplicaciones. La magnitud de la transformaci\u00f3n de su h\u00e1bitat natural fue tal que han quedo pocos restos naturales. Es por esto que en el pasado pr\u00f3ximo se llego a poner en duda su car\u00e1cter natural en la Pen\u00ednsula Ib\u00e9rica. Hoy no hay razones para dudar de su car\u00e1cter aut\u00f3ctono. Recientemente se han encontrado f\u00f3siles de madera y hojas y polen que confirma su car\u00e1cter natural en la Pen\u00ednsula Ib\u00e9rica, si bien no hay unanimidad en la extensi\u00f3n que pudo tener su distribuci\u00f3n natural. En la actualidad donde m\u00e1s abunda es en las cuencas del Duero, Tajo, cabecera de la cuenca del Guadiana, Guadalquivir, Ebro y las restantes grandes cuencas mediterr\u00e1neas. Est\u00e1 presente en la Isla de Mallorca y Menorca. Es raro en Galicia y en las cuencas que vierten al Cant\u00e1brico. Asilvestrado se encuentra en la isla de Tenerife.<\/p>\n Su madera se ha empleado para la producci\u00f3n diversas piezas (ejes de carros, utensilios de cocina, construcci\u00f3n naval, etc.), como tutor de vides, como productor de ram\u00f3n para el ganado y con fines ornamentales.<\/p>\n Esta especie tambi\u00e9n ha sido nombrada como Ulmus campestris<\/em> y Ulmus procera<\/em>, aunque a \u00e9ste \u00faltimo algunos autores lo consideran como un tax\u00f3n independiente<\/p>\n [\/vc_column_text][\/vc_column][vc_column width=\u00bb1\/2″][vc_column_text]<\/p>\n [\/vc_column_text][vc_single_image image=\u00bb787″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][vc_single_image image=\u00bb786″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][vc_single_image image=\u00bb785″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][vc_single_image image=\u00bb784″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][vc_single_image image=\u00bb783″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][vc_single_image image=\u00bb782″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][vc_single_image image=\u00bb773″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][vc_single_image image=\u00bb774″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][vc_single_image image=\u00bb775″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][vc_single_image image=\u00bb776″ alignment=\u00bbcenter\u00bb border_color=\u00bbgrey\u00bb img_link_large=\u00bbyes\u00bb img_link_target=\u00bb_blank\u00bb img_size=\u00bbmedium\u00bb][\/vc_column][\/vc_row][vc_row][vc_column width=\u00bb1\/1″][vc_separator color=\u00bbgreen\u00bb align=\u00bbalign_center\u00bb border_width=\u00bb3″][\/vc_column][\/vc_row]<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" [vc_row][vc_column width=\u00bb1\/1″][vc_column_text] Ulmus minor Mill. 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